Hace años este autor pegó mucho con un libro "Cometas en el cielo" que acabó siendo una película. La gran novedad que supuso para mí, y creo que para la mayoría de los autores, es que el autor es afgano, y no es que sepamos nada de Afganistán aparte de lo que hemos visto en la televisión, en tiempos de guerra.
La historia trata sobre la vida de dos mujeres Mariam y Laila ambas casadas con el mismo violento hombre Rashid. Ambas mujeres de la ciudad de los "mil soles espléndidos".
Mariam es una hija bastarda de un rico comerciante y propietario que acaba siendo malcasada con un hombre treinta años mayor al suicidarse su madre, que la ha criado en un kolba, una especie de casa rural de adobe a las afueras de la ciudad. Mariam no ha conocido ningún tipo de lujo, ningún tipo de afecto y se ve traicionada por su padre, que trata de contentar a sus múltiples esposas. Mariam vivirá una vida de pesadilla con Rashid, que ante la impotencia de no poder tener hijos con Mariam responde violentamente.
Casi 20 años después, en medio de la guerra que asola Afganistán durante 20 años Laila, una vecina de ambos, hija de un matrimonio liberal queda huérfana por las bombas. Laila pasará de ser una mujer educada, que vive libremente, a casarse con Rashid y verse obligada a llevar burka y no poder salir de casa.
Entre ambas, pese a la rivalidad inicial se va a establecer una relación de compañerismo contra el patético Rashid, que trata de hacerles la vida imposible.
El gran punto fuerte de este libro es la humanidad que desprende, sobre todo en el ambiente que se desarrolla. Nos habla de una Afganistan que trata de modernizarse, en los tiempos de la invasión comunista, y que cae de repente en la mas profunda radicalización.
Temas como la obligatoriedad de vestir con burka, la prohibición de trabajar a las mujeres, y la destrucción de los budas sagradas son tratados desde la perspectiva de los afganos de ciudad, que ven destruida su ciudad por las bombas de uno y otro bando.
Lo he disfrutado muchísimo, y he aprendido aún mas. Realmente merece la pena leerlo, aunque a veces se te escape alguna lagrimita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario